miércoles, 11 de noviembre de 2009

El padre que siempre tuve

Tal vez para muchos es sabido, y lo más probable es que lo sepan por fuente directamente mía, que nunca conocí a mi padre. No me pesa ni me es incómodo decir que aquel hombre que me creó, que me concibió junto con mi madre, no estuvo junto a mí después de eso. Pero no voy a negar, que siempre me pregunto (y ahi le mentí a Yasmina) quien será él. Sobre todo, me pregunto, creo, como hubiera sido tenerlo a mi lado.

Sé que tengo el "permiso" implícito de mi madre al contar que yo fui producto de un embarazo no deseado. Es decir, que no estaba en la planificación de dos personas estar ahí. Y, también, creo que tengo el permiso de mi madre en contar, a todo aquel amigo o persona que lea esto, que mi madre, cuando estaba en su barriga, tuvo y sintió la idea de abortar. Pero, optó al final por traerme a este mundo. Trato de sentir e imaginar esos momentos que ella padeció. Desesperación, confusión, miedo...miedo, esa es la palabra que ella usó cuando yo le pregunté que sintió. Miedo, miedo en no saber que hacer. Miedo en el futuro que venía.

Han pasado ya 20 años desde esa decisión. Y, bueno, ha sido una vida, no dos vidas, sino una vida de dos personas. En 20 años he querido, odiado, y, aunque algunos no lo crean, maldecido a mi madre. No espero que me den la razón, ni que me comprendan, solo que me lean. Mi madre no ha sido la madre perfecta, ni yo tampoco el hijo perfecto. Pero, claro, una pregunta sería ¿que és una madre perfecta? Tal vez, creemos que una madre perfecta es aquella madre que nos pintan algunos medios, no? La madre cariñosa, entregada completamente a su hijo, a su familia y que quiere lo mejor de ellos. Bueno, yo hasta hace unos años, creía que mi madre no era eso. Creia eso, porque mi madre siempre llegaba del trabajo, enojada, con una amenaza que si le hablaba, o me quejaba de algo, iba a desfogar su ira conmigo. O recuerdo, una vez, que me gritó enfrente de un taxista, pues, si llegabamos tarde, me iba a hacer un escándolo horrible e incluso golpearme. O cada vez que me enfermaba, siempre me gritaba. Yo pensaba que mi madre, pues, me tenía como una responsabilidad. Sonará feo, pero, pensaba que era su responsabilidad por "haber metido la pata".

Por mucho tiempo desee tener otra madre, otra vida, otra cosa, deseaba saber si el vivir con mi padre hubiera sido mejor. Deseé, como todos alguna vez creo, nunca haber nacido. Así fueron varios años de mi vida. Pensaba en mi madre como un ser al que debía temer. Que al equivocarse nunca podía decirlo, aceptarlos. Y lo que pensaba lo odiaba. Creaba odios, temores, maldiciones. Y prometí ante Dios nunca ser así. E incluso prometí que apenás pudiera largarme de este hogar, nunca más volver a verla. Me escapé varias veces, nos peleabamos varias semanas. Semanas sin hablar... ni hola ni chau. Tal vez unos me dirán "que basura eres, es tu madre no?", otros dirán: "brother, madre soltera, comprendela tmb no?". Pues, bien, tienen razón, pero no sé hasta que punto lo decían por un "formalismo" de una idea de "respeto a la madre" o lo decían porque realmente entendían mi situación y me trataban de aconsejar. Tal vez ahí pocas personas me entendieron creo. Especialmente tres diría yo. No diré nombres, pues no compete a la situación.

Han tenido que pasar 20 años, bueno, tal vez 9 años, porque cuando tenia 10 u 11 años todavia vivía en un mundo "ideal, feliz", para que me de cuenta que amo a mi madre. Y, me he dado cuenta, que la madre perfecta no existe, porque, mi madre si era cariñosa conmigo, sí se entregó a mí incondicionalmente. Pero no a la manera que se cree que debería ser. Sino, lo hizo, a la manera en que mejor pudo hacerlo. Cuando estaba mal, su enojo no era por un enfado de "te volviste a enfermar otra vez". Sino, porque, al ser personas de condición económica media baja, tenia el temor a no encontrar los medicamentos que me puedan ayudar. Sufro de una alergía que en realidad, para este país, tratar, es costosa. Que cuando volvía enfadada era porque le iba mal en el trabajo, el cual temía perder, pues, si lo perdía, su hijo, su razón de ser, como ella me llama, no iba a tener que comer, con que educarse. Así, recién me doy cuenta de que mi madre si fue una madre, y no una mujer que cumplió una responsabilidad.

Asi que ahora, como diría un gran amigo: "pero, si tu mamá y tú son tu familia", he encontrado mi familia. Mi madre y yo. Y, si bien aun deseo saber quien es mi padre, ya no estoy triste por nunca haberlo conocido, ni pienso que las cosas hubiera sido mejor con él. Creo, que, tengo que sacar lo mejor de lo que he vivido. En realidad, mi madre para mí ahora no es ni mi madre ni mi padre, es la persona que más amo en el mundo (cuando encuentre o conozca a alguien más, será una de las dos personas que mas ame en el mundo) Tal vez, aún me pesa perdonar cosas y acciones a mi mamá. Me pesan, porque me dolieron. Pero, creo, que he dado un paso. Pues, me di cuenta, que no podía ser feliz sin saber quien era esa mujer, sin entenderla, y sobre todo, sin quererla. Esa mujer, que, cuando tuve, tal vez, una de las experiencias más fuertes de mi vida (y que doy gracias a Verónica también por ello, amiga, te quiero mucho) me prometió literalmente, acompañarme siempre en todo lo que haga. Me prometió que aun así me equivocara, ella estaría ahí. Me saqué un gran peso de encima, porque, soy libre de querer a mi madre al fin. Libre de no pensar que no soy más una responsabilidad. Libre de pensar que si soy feliz, es porque también ella es feliz conmigo (siempre pensé que si yo era feliz, y ella no lo era, iba a ser mi culpa). Así que, tal vez lo que escribí no va de acuerdo al título, pero, doy gracias a este espacio para poder decir que siempre tuve un padre, solo que nunca lo ví.

Quiero y amo a mi madre. Pero lo quiero demostrar. Quiero empezar de nuevo. Hubiera sido mejor antes derrepente. No sé. No lo sé. Pero ella reconoció errores que tuvo, y yo he reconocido los míos. Y nos ha unido. Porque al final, si un día llegó triste a mi casa, ella me verá y hará lo imposible por verme, tal vez, aunque sea por un momento feliz. Pues, ella también, me cuenta llorando que le costó 50 años recién conocer y querer a sus padres. Mis abuelos maternos tampoco tuvieron una vida "amorosa", me cuenta mi madre, que sus padres le contaban como, allá en mi querida Arequipa, sus padres, es decir mis bisabuelos, eran duros con ellos. Nunca acabaron el colegio, tuvieron que trabajar. Mi abuelo, incluso, nunca conoció tampoco a sus padres. Para ellos siempre el amor al hijo iba relacionado con corregirlo y educarlo. Nada más. Mi madre, llorando, me cuenta, que ella hubiera deseado que tal vez, solo tal vez, un día su madre la abrazara. Pero, al igual que yo ahora, tampoco la juzga. Creo que cuando se habla en la biblia sobre honrar a tu padre y a tu madre, y, el no juzgarlos, va por ese lado. Creo que el criticar a mi madre y hacer el esfuerzo de entenderla, me han llevado a no juzgarla, sino entenderla.

Así que, al final, puedo decir amo a mi mamá. No sé si deseara volver el tiempo y cambiar todo. Sería un poco escapar de los problemas. Creo que esta experiencia que viví me sirvió para responder esas preguntas: ¿dónde está mi padre?, y, ¿por qué mi mamá es así?... Creo que ya, en parte, las respondí. Mi padre está donde yo quiero que esté tal vez. Tampoco quiero pasar de espiritualista. Sé que mi padre está en algún lado de este planeta, pero padre en el sentido de aquella persona que me cuido, estuvo siempre acá conmigo.

Una frase que escuché en una película protagonizada por 50 cent: "criamos a un niño para que al final, un día, muera... eso es lo que hacemos un padre y una madre; pero lo hacemos, porque si no lo hicieramos, que seríamos entonces?" Si alguno que lea esto aun no ha conocido a su madre, creanme que aun no es tarde para ello. A mí me costó 9 años, a mi madre, unos 45 años tal vez.





4 comentarios:

oinkoink dijo...

me mataste.. no sabia todo eso.. depues de tanto tiempo de conocerte.. ohh.. papi.. qe weno qe en vdd hayas encontrado respuesta a tus preguntas, para si estar en paz y feliz al lado de tu madre, osea la kerida y estimida Sra. Nancy!

TE KIERO, necesitamos vernos y hablar mas.. miiil besos

Cutti dijo...

ya ves! tú tienes cosas más interesantonas que bloggear que yo. Me alegro por ti querido amigo. Gracias por esta maravillosa entrada.

Josue dijo...

Tienes una habilidad para escribir increible
Admas de ser un petero la gran parte del tiempo, siempre muestras una madurez elogiable
Te doy de puntuacion de 3 petes con flete de 60 gradosXD

José dijo...

jaja josueXD! 60 grados es muy hardcoreXD! hahaha